¿A qué llamamos redes informales y cuál es su importancia?
Las redes informales de apoyo abarcan el círculo cercano de una persona: familiares, amigos, vecinos, compañeros de trabajo e, incluso, conocidos que actúan como una fuente de recursos emocionales, afectivos y prácticos.
En el contexto de intervención con familias de niños, niñas y adolescentes en residencias de protección, estas redes funcionan como un soporte adicional que complementa los recursos institucionales, ya que proporcionan apoyo continuo y, en muchos casos, ayudan a las personas a enfrentar situaciones de necesidad de manera más inmediata que las redes formales.
Reconocer y fortalecer las redes informales permite a las familias contar con herramientas propias para sobrellevar dificultades, promoviendo su resiliencia y ofreciendo un soporte valioso que permanece después de finalizada la intervención.
Dónde poner atención
Para integrar las redes informales en una intervención es necesario identificarlas y ayudar a la familia a percibirlas como un recurso valioso. Es útil observar:
- Quiénes conforman la red de apoyo informal: Identificar a los familiares, amigos, vecinos y otros contactos que pueden actuar como fuentes de ayuda.
- El tipo de apoyo que proporcionan: Determinar si el apoyo es emocional, material o de otro tipo, permite ajustar la intervención y priorizar los recursos más accesibles. También le da la posibilidad a la familia de saber a quién recurrir dependiendo de la necesidad y apoyo que requiera.
- Percepción de la familia sobre su red: Facilitar que los miembros de la familia reconozcan a sus contactos y valoren la importancia de cada relación ayuda a potenciar estos apoyos y a generar vínculos más sólidos.
Buenas prácticas
Potenciar la percepción de los apoyos informales:
Las / Los profesionales pueden ayudar a las familias a identificar y reconocer los recursos que existen a su alrededor, promoviendo la percepción positiva de su red de apoyo. Esto incrementa la autoestima y la confianza de los miembros familiares.
Fortalecer y ampliar las conexiones:
Realizar actividades o talleres que fomenten la creación de vínculos entre pares es útil, especialmente en casos donde las personas llegan sin ninguna red de apoyo.
Uso del mapa de red social:
Esta herramienta facilita un análisis detallado de las redes informales, proporcionando información sobre la calidad de los vínculos. Su uso permite planificar la intervención de manera más eficaz, enfocándose en las interacciones significativas.
Capacitación de las/ los profesionales en análisis de redes:
Fomentar el uso de técnicas de análisis de redes y mejorar las habilidades en mediación permite un abordaje más comprensivo y ajustado a las realidades de cada familia, aprovechando mejor los apoyos disponibles.